La información fue difundida por Cadena 3, quien entrevistó al joven que contó: “Soy insulinodependiente y tenía esa medicación, esencial para mí, en la heladera. Debía permanecer refrigerada entre 0 y 8 grados”.
El damnificado, cuya vivienda se ubica en la calle Liniers, entre Juan B. Justo y Tillard, dijo que cada caja de medicación vale 10 mil pesos y no sabe qué hacer.
“Uso dos tipos de insulina. Son 10 cajas de esa medicación que no sirven más”, lamentó.
Marcelo lleva más de 24 horas sin energía eléctrica en su domicilio y la pérdida de los medicamentos le produjo "daños irreparables".
Cabe recordar que, los cortes de luz afectan a varios barros. La misma situación se vivió en Villa María con los cortes registrados por las tormentas.
