La inflación bajó en mayo al 5,1%, después del salto al 6,7% en marzo y al 6% en abril por la guerra de Ucrania, pero acumula en los últimos 12 meses un alza del 60,7%, lo que representa el mayor nivel interanual desde enero de 1992, cuando fue del 76%, en la salida de la hiperinflación de 1989/1990.
El dato del mes de mayo fue informado ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En los primeros cinco meses del año la inflación ya sumó un 29,3%.
Si bien el Índice de Precios al consumidor (IPC) del quinto mes del año volvió a mostrar un ritmo de suba de precios mensual muy alto, marcó el segundo mes de desaceleración del ritmo de precios desde el pico que marcó el 6,7% de marzo.
Los supermercados recambian todos los precios una vez por mes.
Salud, transporte y ropa fueron los rubros en los que más aumentaron los precios el mes pasado. Entre los alimentos se encarecieron más la leche, el azúcar, la harina y las hamburguesas.
Principales incrementos:
Salud (6,2%, por el aumento de las prepagas y los medicamentos), transporte (6,1%, por el encarecimiento de la nafta y el gasoil y del boleto de colectivo en el interior) y ropa (5,8%) fueron los rubros que más impulsaron la suba del índice de precios al consumidor (IPC) en mayo.
Los alimentos se encarecieron un 4,4%, lo que agrava la situación de los más pobres, que se suman cada vez más a las manifestaciones piqueteras en reclamo de más empleo, más salario, incorporación de desempleados y trabajadores informales al plan Potenciar Trabajo y mayor distribución de mercadería en comedores populares.
Pero el Ministerio de Economía, que conduce Martín Guzmán, destacó que se trató del menor incremento de la comida registrado en 2022.