El remisero, del cual no trascendió su identidad, cumplió con su parte viajando a la ciudad de Bell Ville donde recibió un paquete de manos de un sujeto, en la vía pública (Bv. Ascasubi) en la zona Sudoeste de la ciudad cabecera del Departamento Unión, al quien hizo entrega del dinero para, posteriormente volver a su localidad a entregar la flamante adquisición, con la intención de recobrar los $ 9.000 y cobrar el servicio por el viaje.
Ante la imposibilidad de conectarse con el número desde el cual se lo había contratado, decidió abrir el paquete, encontrando en su interior una caja de un teléfono celular pero en su interior solo había trozos de ladrillo. Llegando a la conclusión que había sido víctima de una estafa, se dirigió a la dependencia policial de Justiniano Posse donde radicó la denuncia.
El Oficial Martín Mansilla, explicó que el remisero estafado en su buena fe recibió un llamado telefónico donde le pidieron que vaya a Bell Ville a buscar un teléfono que había comprado y que debía ser ese mismo día ya que de lo contrario perdía la oportunidad. Además la persona que lo contacto le dijo que no podía viajar porque estaba trabajando en el campo.
Al retornar a Posse el remisero llamó al número que le habían hecho el encargo, pero no le respondieron. Al día siguiente volvió a llamar y ante la falta de respuestas resolvió abrir el paquete y comprobar que contenía solo un pedazo de ladrillo.